Esto asegurará que el niño autista tenga la mayor posibilidad de éxito en la escuela.

“Estilos de aprendizaje” es un concepto que intenta describir los métodos por los cuales las personas obtienen información sobre su entorno. Las personas pueden aprender viendo (visualmente), escuchando (auditivamente) y/o tocando o manipulando un objeto (aprendizaje cinestésico o “práctico”). Por ejemplo, mirar un libro ilustrado o leer un libro de texto implica aprender a través de la visión. Escuchar una conferencia en vivo o en cinta implica aprender a través de la audición. Y presionar botones para determinar cómo operar una videograbadora implica aprender cinestésicamente. Estilos de aprendizaje y autismo.

Generalmente, la mayoría de las personas aprenden usando dos o tres estilos de aprendizaje. Curiosamente, las personas pueden evaluar sus propios intereses y estilo de vida para determinar las formas en que obtienen gran parte de su información sobre su entorno.

Algunas personas, cuando leen un libro, pueden entender fácilmente el texto. Por el contrario, puede resultarles difícil escuchar un audio de ese libro, simplemente no pueden seguir la línea de la historia. Por lo tanto, son aprendices visuales fuertes y aprendices auditivos moderados (posiblemente aprendices auditivos pobres). En cuanto al aprendizaje cinestésico, pueden ser muy buenos desarmando objetos para aprender cómo funcionan, como una aspiradora o un ordenador.

Estilo de aprendizaje y entorno educativo

El estilo de aprendizaje de uno puede afectar el desempeño de una persona en un entorno educativo, especialmente desde la secundaria hasta la universidad. Las escuelas generalmente requieren tanto el aprendizaje auditivo (es decir, escuchar a un maestro) como el aprendizaje visual (es decir, leer un libro de texto). Si uno es pobre en una de estas dos formas de fuentes de aprendizaje, es probable que dependa principalmente de su fortaleza (por ejemplo, un aprendiz visual puede estudiar el libro de texto, en lugar de confiar en el contenido de la conferencia).

Usando esta lógica, si uno es pobre tanto en el aprendizaje visual como auditivo, puede tener dificultades en la escuela. Además, el estilo de aprendizaje de uno puede estar asociado con la ocupación de uno. Por ejemplo, aquellos individuos que son aprendices cinestésicos pueden tender a tener ocupaciones que involucren sus manos, como almacenistas, mecánicos, cirujanos o escultores. Los aprendices visuales pueden tender a tener ocupaciones que impliquen el procesamiento de información visual, como procesadores de datos, artistas, arquitectos o clasificadores de piezas de fabricación. Además, los aprendices auditivos tienden a tener trabajos que involucren el procesamiento de información auditiva, como vendedores, jueces, músicos, operadores del 9-1-1 y camareros.

Estilos de aprendizaje y autismo

Parece que es más probable que las personas autistas confíen en un solo estilo de aprendizaje. Al observar a la persona, uno puede determinar su estilo principal de aprendizaje. Por ejemplo, si a un niño autista le gusta mirar libros (por ejemplo, libros ilustrados), mirar televisión (con o sin sonido) y tiende a mirar detenidamente a las personas y los objetos, entonces puede ser un aprendiz visual.

Si un niño autista habla en exceso, disfruta que la gente le hable y prefiere escuchar la radio o la música, entonces puede ser un aprendiz auditivo. Y si un niño autista está constantemente desarmando cosas, abriendo y cerrando cajones, y presionando botones, esto puede indicar que el niño es un aprendiz cinestésico o “práctico”.

Una vez que se logra determinar el estilo de aprendizaje de una persona, confiar en esta modalidad para enseñar puede aumentar en gran medida la probabilidad de que la persona aprenda. Si uno no está seguro de qué estilo de aprendizaje tiene un niño, o está enseñando a un grupo con diferentes estilos de aprendizaje, entonces la mejor manera de enseñar podría ser usar los tres estilos juntos.

Por ejemplo, al enseñar el concepto “gelatina”, se puede mostrar un paquete y un tazón de gelatina (visual). Describir sus características como su color, textura y uso (auditivo). Y luego dejar que la persona lo toque y lo pruebe (cinestésico).

Enseñar según el estilo de aprendizaje

Un problema común evidenciado por los niños autistas es correr por el aula y no escuchar al maestro. Este niño puede no ser un aprendiz auditivo; y por tanto, no está atendiendo a las palabras del profesor. Si el niño es un aprendiz cinestésico, el maestro puede optar por colocar sus manos sobre los hombros del niño, y luego guiar al estudiante de regreso a su silla, o ir a la silla y moverla hacia el alumno. Si el niño aprende visualmente, es posible que el maestro deba mostrarle su silla o darle una imagen de la silla, y hacerle un gesto para que se siente.

Enseñar según el estilo de aprendizaje del estudiante puede tener un impacto en si el niño puede o no prestar atención y procesar la información que se le presenta. Esto, a su vez, puede afectar el rendimiento del niño en la escuela, así como su comportamiento. Por lo tanto, es importante que los educadores evalúen el estilo de aprendizaje tan pronto como un niño autista ingrese al sistema escolar, y que adapten sus estilos de enseñanza en armonía con las fortalezas del estudiante.

Esto asegurará que el niño autista tenga la mayor posibilidad de éxito en la escuela.